Aci en italiano se pronuncia «achi», y muy próximos al norte de Catania, hay varios pueblos cuyo nombre comienza así. Aci Castello, Aci Trezza y Aci Reale, son los más renombrados (hay 6 más), aunque yo supe de ellos por primera vez cuando trataba de encontrar una casa cerca del mar para vivir en Siclia.

Plaza principal de Aci Trezza

Los tres son pueblos marineros con encanto, con pequeños puertos pesqueros y que comparten una tradición que hunde sus raíces en la mitología griega: conforman la Ribera de los Cíclopes. Por muy evidente que pueda parecerme ahora, la verdad es que cuando llegas a Sicilia piensas siempre en encontrar una tierra influenciada por los romanos y los sucesivos pueblos que dominaron el Mediterráneo, como nos ocurrió en España. Pero la influencia griega en Sicilia es enorme y se detecta en muchísimos lugares.

La isla Lachea y los farallones, desde Aci Castello

Según la mitología griega, Aci era el joven pastor enamorado de la ninfa Galatea, que es asesinado por el celoso cíclope Polifemo (el volcán Etna), que le lanzó un enorme trozo de lava mientras se bañaban en el mar. La sangre de Aci se derramó formando un río que fluye desde el Etna subterranemente, con agua de tonalidad rojiza debido a la lava, y desemboca en el mar Jónico, precisamente en donde hoy esta Aci Reale.

Farallón grande en Aci Trezza

A su vez, la Ribera de los Cíclopes debe su nombre a la leyenda de Ulises y Polifemo, narrada en la Odisea. La astucia de Ulises para escapar de Polifemo, cegándole su único ojo, provocó su ira y, en un intento de impedir su huida en barco, lanzó al mar numerosas rocas para tratar de aplastarlo. Esas rocas son los farallones que están frente a la costa de Aci Trezza, emergiendo en un mar limpio y transparente que invita a tomar un baño.

Farallones de lava en la Ribera de los Cíclopes

Dejando la leyenda a un lado, estos farallones son además una demostración de la fuerza de la naturaleza. Su formación se debe en realidad a erupciones subacuáticas de lava ocurridas incluso antes de la formación del Etna. La colada basáltica emergió y se enfrió al contacto con el agua y el aire, formando este tipo de estructuras geológicas.

Farallones grande y pequeño

Lo cierto es que estos tres pueblos pesqueros tienen encanto. Parar a tomar algo a la plaza de Aci Castello, situada al pie de los restos del castillo normando que hoy acoge un museo, o recorrer el paseo marítimo de Aci Trezza es una de las escapadas agradables que se puede hacer un sábado o domingo desde Catania, y así lo deben pensar muchos cataneses por lo concurrido que suelen estar ambos lugares.

Plaza de Aci Castello

Otra de las actividades recomendadas en Aci Trezza es disfrutar de su buena cocina marinera. Al ser pueblo de pescadores, cuentas con la garantía de calidad en el producto, y hay muchos restaurantes a lo largo de su paseo marítimo donde sentarse a degustar la sabrosa cocina siciliana.

Calle de Aci Trezza

Aci Reale está algo más alejado de la costa (su puerto pesquero está a dos kilómetros), pero también tiene su encanto. Es el más grande de los Aci, y es también famoso por sus carnavales, a los que trataré de acudir el próximo año. Este año la visita la hice para descubrir las calles y plazas de su centro histórico, donde también hay muestras grandiosas del barroco siciliano, de hecho, forma parte del elenco de ciudades del Val di Noto.

Basílica de San Pedro y San Pablo, con su campanile

La visita al centro histórico es breve pero muy aprovechada, ya que sus monumentos más importantes están concentrados en pocos metros. Paseando por la calle Umberto I se divisan palacios y edificios nobles que muestran la riqueza e importancia que en su día tuvo esta localidad.

Plaza del Duomo de Aci Reale

La Plaza del Duomo es sin duda el corazón de la ciudad. Es una plaza conformada por tres edificaciones muy notables: la Catedral, la Basílica de San Pedro y San Pablo, y el Ayuntamiento. El interior de la Catedral es muy bonito y grandioso, siempre más elegante que el de la Basílica de San Pedro y San Pablo, aunque este también merece la pena visitarlo.

Catedral de Aci Reale

Por ultimo, la Basílica de San Sebastian, uno de los patronos de la ciudad junto a Santa Venera, merece también una visita. Declarada monumento nacional, su exterior llama poderosamente la atención, y no deja de ser sorprendente el número de iglesias majestuosas que tiene esta pequeña ciudad. Solo pude verla por fuera, pues estaba cerrada, pero por lo que leo su interior también es muy bonito.

Basílica de San Sebastián

Aún me quedan cosas por ver en los Aci, entre ellas los puertos pesqueros de Aci Reale, Santa Maria della Scala y Capo Mulini. Pero estando tan próximo a Catania (menos de 17 km), sé que me escaparé con cierta frecuencia a los Aci a disfrutar de su encanto.

1 Comentario

  1. Loreto Raimundo Martínez agosto 18, 2020 at 11:11 pm

    Pues si los Aci están vicino a Catania, Los visitaremos y pasearemos por su paseo marítimo en Aci Castello y en los otros visitaremos sus iglesias y Basílicas 👋👋👋Muy interesante. Bsss😚😚

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